¿Qué pasa con los gimnasios?
Este jueves, el gobernador de la provincia de Córdoba, Juan Schiaretti, anunció nuevas flexibilizaciones. Entre ellas se esperaba que se sumaran los gimnasios y los natatorios, pero no fue así.
Muchos gimnasios están al borde de bajar sus persianas. Una gran mayoría de disciplinas deportivas fueron habilitadas, pero parece que a los centros de actividades físicas no les llega la hora.
“La situación es terrible. No sé cuánto tiempo más va a aguantar el sector nuestro. Esto es un desastre ya. El 25% de los gimnasios del país cierra. Es una situación complicada. La luz te llega, el municipal te llega, los alquileres los siguen cobrando y uno no puede generar ingresos”, manifestó Germán Martínez, propietario de GMartínez Gimnasio.
El disgusto no solo es por la difícil situación económica que genera estar cerrados durante tanto tiempo, sino también por poner en riesgo la salud de las personas: “No dejarte asistir a tu gimnasio es privarte de cuidar tu salud”, es uno de los lemas que se puede observar en las diferentes redes sociales de dichos establecimientos.
Además, plantean que los gimnasios son más seguros que otros rubros que ya fueron habilitados como bares y restaurantes: “Los gimnasios son muy higiénicos. Siempre se mantienen limpios, el equipamiento, las máquinas, las butacas. La gente en Córdoba tiene la costumbre de ir al gimnasio con su toalla, es algo que tenemos a favor. No todos tienen esas costumbres como la tiene el cordobés”, sostuvo Germán.
Además, agregó que los protocolos correspondientes ya están presentados desde la Cámara de Gimnasios de Córdoba al COE: “El COE ya lo tiene definido. Ese tema está hace rato. Solo tienen que dar la orden, no hay un porqué de que no podamos abrir”.
La razón por la que no se habilita este rubro todavía no queda clara. Martínez cree que se trata de una cuestión de presión gremial: “Abrieron bares y restaurantes porque está la presión gremial de los gastronómicos y los Centros de Empleados de Comercio. Nosotros nunca tuvimos un gremio, entonces que esperen los gimnasios. La presión de los gremios es lo que los molesta. No hay razón. Estamos en fase 5 y en zona blanca, está mucho más que claro que nos tienen que habilitar”, concluyó.