La incorporación de las mujeres al deporte riotercerense
En 1936 Adolf Hitler organizó los Juegos Olímpicos de Berlín. La delegación argentina presentó 51 deportistas y por primera vez incluyó a una mujer, la nadadora Jeannette Campbell, quien ganaría una medalla de plata en 100 metros estilo libre.
El equipo olímpico obtuvo en total, siete medallas, dos de oro, dos de plata y tres de bronce. En el medallero general ocupó la posición número 16 sobre 49 países participantes.
El deporte argentino seguía creciendo y comenzaban a destacarse algunas mujeres que alcanzaban un buen nivel competitivo. Mientras esto sucedía a nivel nacional, Río Tercero tenía muy pocas mujeres deportistas debido a que tanto Atlético como 9 de Julio habían nacido como clubes de fútbol y solo existía un reducido grupo de tenistas en el Lawn Tenis local.
Sin embargo, el logro alcanzado por la primera atleta olímpica del país y la llegada del básquetbol al pueblo generaron un entusiasmo que ocasionó un crecimiento del deporte femenino.
En abril de 1936 las mujeres se incorporaron definitivamente a la vida deportiva local cuando quedó formado el primer equipo femenino de básquetbol que también representaría a 9 de Julio. El mismo estaba integrado por Ema Guala, Anita Bazán, María Fenoglio, Teresa Bongioanni, Nelly Cantú, Amanda Loza, Ñata Suppo, Felisa Mercado, Cora Amuchástegui, Ligia Cantú, Haydee Gagliardi y Anita de Osta, quienes se convirtieron en las primeras basquetbolistas del pueblo y dieron el gran impulso al deporte femenino de Rio Tercero.
FUENTE: Libro NUETRO GEN DOMINANTE (Marcelo Calderón).